Mantener la concentración es una habilidad indispensable para el estudio y para multitud de tareas del día a día. Pero no siempre es fácil; sobrecarga de trabajo, estrés, interrupciones, distracciones, falta de actitud… Son muchos los factores que pueden influir para no dejarnos centrar la atención en una sola tarea. A continuación os damos algunos consejos que pueden ayudaros a superar la falta de concentración y que también podéis compartir con vuestros alumnos para facilitarles el estudio.

• Toma notas a mano. Escribir a mano nos ayuda a mantener la atención sobre lo que estamos anotando y ayuda a asimilar mejor los conceptos. Hay estudios que así lo demuestran.
• Usa agenda. Es uno de los instrumentos imprescindibles de una buena organización. La agenda nos permite planificar el estudio.
• Haz listas. Ante una montaña de tareas es fácil colapsarse o querer abarcarlas todas a la vez. Lo mejor es detenerse a pensar cuales son las prioritarias, ordenarlas por importancia e ir ejecutándolas una a una. El gesto de tachar una tarea de la lista es una dosis de motivación para afrontar la siguiente.
• Divide las tareas más laboriosas. A veces la falta de concentración llega cuando no nos vemos con ánimo de afrontar una tarea larga y difícil. Para que sea menos duro, podemos dividirla, de manera que podamos abordarla por partes.
• Subraya. Marcar las palabras y frases claves de un texto o los datos importantes nos hace recordarlos mejor. Además, si necesitamos volver a recurrir a ellos los encontraremos fácilmente.
• Cuida el espacio. No es lo mismo trabajar en una mesa limpia que en una mesa llena de objetos que llamen nuestra atención (y nos resten concentración).
• Tómate una pausa. Quizás te hayas colapsado o te ha vencido el cansancio. En ese caso es mejor descansar. Seguro que con las pilas recargadas te será más fácil cualquier tarea. Según varios estudios, dar un paseo por parques o jardines e incluso observar imágenes de naturaleza ayuda a despejar la mente.