En ocasiones nos marcamos metas tan ambiciosas que cuesta alcanzarlas. Es entonces cuando aparece la frustración y el desánimo. Algo parecido puede pasarles a nuestros alumnos si se ven abrumados con las clases y el estudio.
Quizás sea mejor dar pequeños pasos y mantenerlos a largo plazo. Esa es la filosofía del método Kaizen, muy popular en Japón, que consiste en dedicar un minuto cada día, a la misma hora, a una tarea o actividad que nos cueste realizar. Puede parecer poco, y de ahí que sea fácil de cumplir, pero es muy efectivo para instaurar un hábito. De hecho, “Kaizen” significa “mejora continuada”.
Por ejemplo, a un niño al que no le guste leer, le podemos proponer que solo lea una página cada día. Es una meta fácil de alcanzar y deberemos reconocerle el hecho de que lo haga para que siga por ese camino. Es posible que pasado un mes, sea él mismo el que quiera leer más páginas cada día, porque ya habrá adquirido el hábito.
En definitiva, solo se trata de jugar con los tiempos y las expectativas para que los pequeños asimilen bien cada práctica y, paso a paso, alcancen sus metas.
¿Te ha resultado útil este contenido?
Puntúalo con estrellas
Puntuación media 0 / 5. Recuento de votos: 0
Hasta ahora, ¡no hay votos!. Sé el primero en puntuar este contenido.
1 comentario
muy bueno. incentivar la participación en clases a veces se torna un poco decepcionante , pues tengo muchos estudiantes tímidos y desanimados para participar en clases.
los métodos que aquí sugieren ,se que van a ayudar muchísimo. gracias,