Desde hace unos años ha proliferado la formación de huertos en las escuelas españolas. Y es que esta constituye una experiencia educativa muy valiosa que permite fomentar el respeto al medio ambiente de una manera extraordinariamente divertida para el alumnado.
Los niños aprenden a trabajar en grupo, ya que desde el inicio del proyecto tienen que organizarse para decidir qué tipo de alimentos se van a cultivar, cómo harán el repartimiento de tareas para el cuidado de las hortalizas, etc.
El requisito básico para la creación del huerto es que se deben sembrar alimentos fáciles de cultivar, como patatas, tomates, zanahorias, o incluso algunos árboles frutales. Los alumnos aprenderán sobre los beneficios que aportan los alimentos que han cultivado y que posteriormente se comerán.
En internet hay muchas guías disponibles para la creación y manejo de un huerto. Desde el Aula de Papel de Oxford os recomendamos los siguientes:
