El informe PISA (Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes – Programme for International Student Assessment, en inglés-) evalua hasta qué punto los alumnos que están a punto de finalizar la educación obligatoria han adquirido algunos de los conocimientos y habilidades necesarios para la participación plena en la sociedad del saber. Se hace mediante pruebas, realizadas cada tres años, a alumnos de 15 años. Estas pruebas evalúan temáticas clave y otros aspectos como la motivación de los alumnos por aprender, sus estrategias de aprendizaje, etc.

En el siguiente vídeo puedes ver algunas de las conclusiones del informe PISA 2015, publicado recientemente.

España, con 493 puntos, está en la línea de Estados Unidos, Francia o Rusia. Pero, ¿qué países encabezan la lista? Finalndia, uno de los países europeos de referencia en educación ocupa el quinto puesto. El cuarto puesto es para Taiwán, tercero para Estonia, segundo para Japón, y en el número uno se encuentra Singapur (556 puntos).

¿Qué ha llevado a Singapur a situarse en lo más alto del informe PISA?
Veamos algunos aspectos relevantes del sistema educativo de Signapur:

– Al finalizar la educación primaria (6 cursos, desde los 6 a los 12 años) los alumnos se someten a la Primary School Leaving Examination, la cual evalua sus conocimientos en lenguas, matemáticas y ciencias. La mayoría la superan, pero su nota influye en la elección del centro donde cursar los estudios de educación secundaria y para dividir a los niños en grupos según su nivel. Estos grupos no son fijos, pues en función de sus progresos los alumnos pueden cambiar de uno a otro.

– La profesión de profesor es una de las más prestigiosas del país y solo los mejores estudiantes pueden acceder al Instituto Nacional de Educación, donde reciben la formación para ser profesores. Sus condiciones laborales van acorde al prestigio de la profesión.

– Singapur destina el 20% de su presupuesto anual a la educación. Esta se entiende como una inversión, no como un gasto.

– Enseñanza basada en la resolución de problemas reales. Se proporciona a los niños las herramientas para que puedan investigar y crear. Desde pequeños aprenden a programar circuitos, drones y videojuegos.

– El bilingüismo es obligatorio. Los alumnos aprenden inglés y su lengua materna (chino, malayo o tamil).

¿Verías bien aplicar medidas similares al sistema educativo español?