¿ Cuántas veces has dicho piensa antes de hacerlo a tus alumnos? ¿O cuántas veces has pensado que tus alumnos necesitan alguna motivación?
No es tarea fácil enseñar a tus alumnos a pensar, a ser inteligentes a la hora de tomar una decisión, a actuar siempre de forma positiva. Compartimos algunas tácticas:
1. El rincón de pensar: consiste en pedir al niño que vaya a pasar un ratito en soledad, con la intención de que «piense» si lo que ha hecho está bien o mal y por qué. Una vez que ellos hayan reflexionado por su cuenta, están en mejores condiciones de reconocer su error y, hacerles entender que su comportamiento no debe volver a repetirse, es más fácil.
Los educadores consideran que sí, que funciona, porque los niños asimilan el mensaje de que hay que cumplir las normas y obedecer. Es una buena manera para fomentar una buena convivencia en clase. Con los niños más testarudas será más difícil, pero cuando repitas el mismo ejercicio unas cuantas veces empezará a tener resultados esta técnica.
2. Educar y crecer en libertad: Para aprender a pensar debemos aprender de los errores y sus consecuencias para poder rectificar. Educa bajo estos criterios, haz que se sientan libres de sus decisiones y aprenderán el sentido de la responsabilidad.
3. Motiva siempre a tus alumnos a hacer los deberes antes de ir a jugar, motívalos hablando con ellos positivamente y reconoce su esfuerzo. Puedes incentivarlos con algún premio. Por ejemplo cada viernes el alumno que mejor se comporte durante la semana podrá elegir donde quiere sentarse en clase.
¿ Y tú utilizarás alguna de estas técnicas?